Polaroid 636 Closeup. Mi experiencia con esta cámara vintage que revolucionó los 90.
¡Hola de nuevo queridos lectores!
Hoy os vengo a hablar de mi experiencia con esta cámara instantánea Polaroid 636 Closeup que llegó a mis manos hace aproximadamente 1 año.
Estas cámaras de fotos fueron super famosas en mi juventud, nos brindaban la posibilidad de ver la fotografía que acabábamos de hacer ¡¡en solo 10 minutos!!, toda una locura.
Para los que seáis más jovenes os pongo en contexto, allá por los años 90 había que esperar a gastar el carrete fotográfico para poder ir a la tienda a revelarlo. Solo entonces podíamos ver el resultado de nuestras fotografías.
Recuerdo que mi cámara instantánea hacía fotos de tamaño carnet. No puedo deciros más sobre ella porque desapareció hace ya bastante tiempo. Seguramente en una de las limpiezas decidí que ya era hora de jubilarla.
Como aficionada curiosa de la fotografía, un día empecé a interesarme por este tipo de cámaras analógicas instantáneas. Morriña de la infancia, supongo. Imaginaros mi emoción cuando un día, en casa de mi suegra, aparece mi pareja con esta preciosidad 😍😍. ¡¡¡ Y en su caja original !!!
Fue uno de sus regalos de Primera Comunión, y la había guardado desde entonces.
Al principio, tenía mis dudas sobre si iba a funcionar o no después de tanto tiempo. Solo tenía una forma de comprobarlo, así fue que compré unos cuantos cartuchos y empecé con las pruebas.

Los controles de la cámara son bastante sencillos.
Podemos controlar la exposición con el deslizador central. Moviéndolo a la izquierda le estaremos diciendo a la cámara que oscurezca la imagen y a la derecha que la aclare. Sin más.
La distancia focal se regula con el deslizador situado a la izquierda. Simplemente tenemos que leer la información que aparece impresa en la propia cámara. Si movemos el deslizador a la izquierda le estaremos diciendo a la cámara que el enfoque será de 1,2 metros hasta el infinito y si lo movemos a la derecha será enfoque a objetos cercanos.
El flash se activa pulsando el botón del obturador completo. Si queremos hacer la fotografía sin flash tendríamos que pulsar solamente la primera parte del obturador (la que está más pegada a la cámara).

Esta foto que comparto con vosotros fue mi primera fotografía Polaroid.
Vivo en un edificio muy alto y las vistas son muy bonitas, así que pensé utilizar esta panorámica para estrenar mi nueva cámara.

En algunas situaciones tuve problemillas con la exposición.
Por ejemplo, en esta fotografía se quemó la parte superior. En días muy soleados (y con el Sol en todo lo alto) hay que tener mucho cuidado con la toma. Lo ideal es cubrir la cámara con un parasol (toldo, sombrilla,…) para evitar exponer la cámara a la radiación solar directa.

Esta es mi fotografía Polaroid favorita hasta la fecha.
CONCLUSIONES:
Sin comparar con otras cámaras instantáneas solo puedo dar mi opinión aislada sobre sus características generales.
PROS:
- Mola mucho tener la fotografía impresa al momento. Además, son bastante robustas y agradables al tacto.
- Personalmente, me encanta el formato cuadrado típico de Polaroid. Es todo un clásico.
- Aunque puede que para otras personas esto pueda ser una desventaja, a mi me encanta su tamaño grandote. Tiene personalidad propia. Cuando la sacas de la funda dice: «Aquí estoy yo». No pasa inadvertida.
- También me gusta mucho el acabado final de las fotografías (cuando conseguimos resultados decentes, claro). Hoy en día, cuando pulsamos la pantalla de nuestro teléfono, esperamos la fotografía perfecta para las redes sociales. Fotografías super brillantes, con colores espectaculares y nitidez perfecta. Sin embargo, las fotografías Polaroid son perfectamente imperfectas. Un poco borrosas, con colores oscuros y desaturados.
CONTRAs:
- En realidad, solo hay una gran pega: El precio de los cartuchos. Actualmente, un paquete color 600 film con 8 fotos cuesta alrededor de 20€ … Siento que el precio de los cartuchos ha cortado las alas a mi creatividad. No he conseguido aprender a utilizarla como me gustaría, me lo pienso muy mucho antes de pulsar el botón. Al final, como en todo en la vida, a fotografiar se aprende fotografiando.
- Serían ideales para Project Life si no fuera por el tamaño (8,8 x 10,7cm o 3,5 x 4,5 pulgadas). No caben en los bolsillos de 3 x 4 pulgadas, ni en los de 6 x 4 pulgadas ya que sobresalen por arriba.
En un futuro espero poder hacer una comparativa entre esta cámara Polaroid y una Instax … Pero para ello primero tengo que hacerme con una 😅.
Espero que os haya gustado este post.
Feliz fin de semana.
¡Hasta la próxima!